El renting es un contrato de alquiler de coches por un plazo de tiempo determinado que suele variar entre 12, 24, 36, 48 meses o más. Como cliente podrás disfrutar de un coche de tu preferencia de forma permanente hasta que el acuerdo legal finalice. Sin embargo, el coche no será propiedad del usuario sino de que seguirá siendo de la empresa arrendadora que -algunas veces- brindan la posibilidad de renting con opción a compra.
Se trata de una alternativa que, al culminar el contrato, ofrece la oportunidad de determinar la prolongación de su tiempo, devolución del coche, volver a solicitar el mismo servicio pero con un vehículo nuevo o pedir la opción a compra del coche que posees actualmente.
Mejor renting con opción a compra
Es importante recalcar que el contrato de renting se diseñó para adquirir un coche durante un periodo determinado y no para conseguir la propiedad del mismo. Suele ser un servicio atractivo porque con una sola tarifa mensual, el cliente puede despreocuparse de los gastos por mantenimiento, reparaciones, pago de los impuestos, seguro a todo riesgo, asistencia en carretera durante las 24 horas y, en caso de avería, hasta un coche de sustitución.
Sin embargo, a pesar de todas las condiciones positivas que implica el contrato, puede haber un mejor renting con opción a compra. Se trata de un acuerdo indicado en el documento legal de la negociación por el vehículo en alquiler. Este asegura que, al finalizar el plazo establecido, se podría comprar el vehículo. Esto como un beneficio para aquellos fanáticos de los buenos coches que quieran conservar el que tuvieron por uno o varios años en alquiler.
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¿Cómo funciona el renting?
- Entra a nuestra página web y encuentra tu vehículo favorito. Además de poder ver algunas fotografías, podrás leer toda la información y características del coche.
- Contáctanos. Entra al apartado «Quiénes somos». En la parte de abajo podrás enviar tus dudas o solicitud de información sobre nuestros servicios. Deberás colocar tu nombre, apellido, teléfono, email y tu mensaje. Luego se procede a los trámites necesarios para legalizar el renting.
- Negociación. Para que se pueda realizar el contrato se debe reunir una serie de requisitos como nómina, ingresos mensuales, deudas pendientes, solvencia económica personal, entre otros requisitos que avalan que el cliente podrá cumplir con las cuotas de pago. Además, tienen que entregar documentos como DNI (Documento Nacional de Identidad), declaración de renta del año anterior, últimos recibos de pago de nómina, justificante que garantice que eres titular de una cuenta corriente. La documentación solicitada, en su mayoría, suele ser en copias. Es posible que uno de nuestros agente pida otros recaudos para poder completar la gestión del servicio de renting.
- Evaluación y firma del contrato. Luego que se cumplan con todos los parámetros establecidos, el cliente pasará a una evaluación que determinará si puede asumir el renting y así se procederá a la para firmar el acuerdo legal entre las partes.
- Entrega del vehículo. La empresa arrendadora hará entrega del coche que se ha adquirido en renting por el plazo de tiempo determinado en el contrato y con todos los beneficios (mantenimiento, seguro, etc) incluidos en un solo coste mensual.
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Cumplimiento de contrato
Es importante aclarar que, en el transcurso de la negociación, se debe indicar que existe la posibilidad de que al finalizar el contrato puede generarse la compra del vehículo. Esto, para dejar constancia de la intención del cliente por tener la opción de que el vehículo sea de su propiedad en el futuro.
Para lograrlo, tienes que cumplir con todas las cláusulas estipuladas en el contrato. De lo contrario, podrás enfrentar sanciones o demandas legales en tu contra. Es por esto que sugerimos, certificar que sí asumirás el compromiso de las cuotas y demás condiciones para que te evites pasar un mal rato más adelante.
Lo mismo ocurre con el kilometraje por el que se establezca el contrato. Si este se sobrepasa, deberás pagar dinero adicional como parte de una penalización por incumplimiento. Estos coches también tienen talleres mecánicos determinados, los mismos son fijados por las marcas o empresas de renting correspondiente. En caso de que modifiques o repares el vehículo sin autorización previa o un sitio que no sea el dispuesto para ello, podrás recibir multas o sanciones.
