Ventajas y desventajas de los coches eléctricos, ¿Merecen la pena

Ventajas y desventajas de los coches eléctricos, ¿Merecen la pena?

Tener un coche eléctrico podría suponer un gasto menos en las finanzas mensuales por lo que a combustible concierne. Sin embargo, esa puede ser una de las tantas ventajas de disfrutar de un vehículo de este tipo que, como también es sabido, posee algunas desventajas. Estas tienen que ver -mayormente- con su mantenimiento; por ser automóviles nuevos, aún no existen suficientes talles mecánicos especializados que puedan hacerle las revisiones y reparaciones correspondientes. Aquí conocerás las ventajas y desventajas de los coches eléctricos.

Si te preguntas sobre sí merece o no la pena tener un coche de este estilo, la respuesta siempre dependerá de tu punto de vista. De manera general, sí, puede ser muy beneficioso poder disfrutar de un coche que no produce contaminación acústica y atmosférica; siendo además, más eficiente que uno tradicional.

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Ventajas de los coches eléctricos

Ventajas y desventajas de los coches eléctricos

Es importante tener en cuenta que los vehículos eléctricos no contaminan el medio ambiente. Esta, es considerada una de las ventajas más relevantes. Sin embargo, para muchas personas eso no es suficiente. Según la experiencia de algunos usuarios, algunos beneficios de los coches eléctricos:

No hay contaminación del aire

Un coche eléctrico no contamina porque no necesita combustible. El trabajo de estos vehículos se atribuye a la conversión de electricidad en energía. Teniendo en cuenta el grave problema de contaminación que enfrentamos hoy en día, este es un punto de vista muy ventajoso para toda la población.

No hay contaminación acústica

Como es sabido, la contaminación no es solo atmosférica. Los coches también producen contaminación acústica, a menos que sea un coche eléctrico, produce muy poco ruido. En un coche eléctrico podemos hablar sin subir el volumen y también podemos escuchar música en tono normal, sin necesidad de hacerlo más fuerte por sonidos que genere el vehículo a nivel técnico.

Son muy cómodos

Como no tiene caja de cambios y el motor es muy compacto y pequeño, nuestro espacio en un coche eléctrico será mucho mayor que en el de un coche tradicional. La mayor parte del espacio de un coche eléctrico es mera comodidad para el conductor y sus invitados. Son coches de tamaño más pequeño que -fácilmente- podremos aparcar en la ciudad.

Ahorros de mantenimiento

Es bastante elevado el costo de mantenimiento de los motores producidos por vehículos diésel o gasolina. Sin embargo, con los coches eléctricos se logra disminuir este gasto. El motivo de este ahorro radica en el motor del vehículo eléctrico, es muy compacto y más fiable que los motores tradicionales. Es muy inusual que un motor de estos presente fallas por ser equipos muy simples y casi sin accesorios.

Los motores tradicionales, por su parte, pueden tener muchas fallas, bien sea en el sistema de enfriamiento, aceite u otra área; incluso, dejar inutilizado el motor. Esto nos dejará sin automóvil, porque reemplazar el motor de un automóvil tradicional es muy costoso y no vale la pena en la mayoría de los casos.

Mayor eficiencia

Los coches eléctricos son más eficientes que los coches tradicionales. Su eficiencia ronda el 90%, mientras que en los coches tradicionales se mantiene en el 30%. Es decir, los coches eléctricos requieren menos energía para hacer el mismo esfuerzo y, por tanto, al final consumen menos.

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Desventajas de los coches eléctricos

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La principal duda de quienes quieren obtener un vehículo eléctrico radica, entre otros temas, en la autonomía y carga de la batería. A continuación, detallamos los inconvenientes de los coches eléctricos más comunes:

Menos autonomía

Cuando hablamos de desventajas de los vehículos eléctricos, sin dudas pensamos en su autonomía. Ese, es el motivo principal que lleva a dudar a los clientes para su comprarlos; y es que, si vamos a recorrer una gran distancia, por ejemplo de Madrid a Barcelona (más de 600 kilómetros), lo tendremos un poco difícil. Esto se debe a que la distancia media de conducción autónoma de un coche eléctrico es de unos 200 kilómetros.

Son embargo, poco a poco han ido saliendo modelos más autónomos que permiten recorridos cercanos a los 600 kilómetros y una capacidad de batería de 100 kWh.

Es necesario aclarar que la autonomía depende de factores como la velocidad, la antigüedad y el estado del aire acondicionado o las baterías.

Ubicación de carga

Antes de comprar un coche eléctrico, se debe recordar que necesitamos un garaje. También hay que tomar en cuenta que debemos instalar una toma de corriente para cargar la batería del coche. Algunas marcas, proporcionarán puntos de recarga e instalaciones cuando compres un coche eléctrico.

No será un problema, si tenemos garaje propio, pero si estacionamos nuestro coche en uno público, se debe solicitar el permiso de los vecinos antes de hacer la instalación respectiva.

Precio

El precio de un coche eléctrico es bastante superior en comparación con el de uno tradicional. Esto se debe al elevado coste de las baterías.

Cabe destacar que, por suerte, hoy en día existe la alternativa de obtener un coche sin batería. Es decir, esta se puede alquilar. Este método permite que, por una cuota mensual, se pueda tener siempre una batería.

Es importante indicar que, las baterías tienen una vida útil de unos 7 años aproximadamente.

Pocos talleres especializados

Aunque son vehículos que funcionan perfectamente y no es frecuentes sus fallas, esto no quiere decir que no ocurra. Ante una situación de este tipo, es difícil encontrar un talles cercano que se especialice en coches elécticos.

En caso de cambiar alguna pieza o hacer alguna revisión, es posible que el servicio sea costoso, delante de los coste de uno tradicional. Esto obedece a que existen menos piezas en España para vehículos de este tipo. En esos casos, deben traerlas de otros países.

Energía para carga

Aunque hemos referido que los coches eléctricos no contaminan, existe un tema que preocupa y es la producción de electricidad para poder cargar estos automóviles. Esta sí contamina.

Se cree que una solución ideal sería producir este tipo de carga mediante energías renovables: solar, eólica o mareomotriz en el caso de la zona costera, entre otras.

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