Opel Crossland – Opiniones, prueba y precios

El Crossland que pierde la «X» de su versión pasada es un coche visualmente estético que prioriza la comodidad y practicidad de sus usuarios. Más allá de ser una versión lujosa, es un SUV muy cómodo. En cuanto a su exterior se visualiza como un todocamino elegante, pero muy deportivo. Sin embargo, en su interior es sencillo y tiene todos los elementos necesarios para convertirse en el coche favorito de la familia.

El modelo de la Opel es una alternativa para quienes desean un SUV pequeño. Aunque el Crossland está en medio de ser un todocamino y un monovolumen. Aunque resulta ser muy cómodo, en el mercado es posible encontrar otros coches con las mismas características por un coste inferior. Por ejemplo, el Hyundai Kona es una alternativa más económica. Pero también puedes encontrar el mismo modelo en versiones más costosas como el Volkswagen T-Cross. 

Hablemos de su aspecto externo

En nuestros comentarios sobre el Opel Crossland podemos destacar que su exterior regala un aire dinámico y deportivo. Entre los cambios más notables con respecto a su versión pasada es el área frontal. Tiene una estética muy definida, pero suave. No hay elementos muy resaltantes o rústicos, sino lisos y estilizados. Toda la atención se centra en la zona larga de sus focos cuyas luces LED y acabados altos le regalan una perspectiva muy elegante.

Estos párpados se integran a la perfección con la parrilla. La misma tiene un aspecto más oscuro y el nombre de la marca es mucho más grande y ocupa una zona alta del coche. Nos gusta que el área lateral es igual de atractiva que la frontal. Para comenzar, la línea negra que dibuja toda la parte inferior del coche y traza un semicírculo sobre las llantas se convierten en protagonista del SUV.

La parte trasera del coche está compuesta por luces LED opcionales que tiene efectos tridimencionales para regalar una característica única. Nos ha gustado que, al igual que la zona delantera, la posterior une ambos faros con una elegante línea negro brillante. Justo debajo puede leerse el nombre del modelo y un poco más arriba la marca.

Conoce el interior del Crossland

En cuanto al review del Opel Crossland podemos argumentar que el diseño interno es muy simple, pero no deja de ser funcional. Los cambios en el interior son muy discretos aunque mejoraron la calidad del material. Uno de los cambios más significativos para nosotros está en la comodidad de los asientos y mantiene la banqueta trasera deslizante.

El espacio interno no es de sus grandes fortalezas por tratarse de un B – SUV, pero el habitáculo del Crossland es uno de esos plus a destacar. Al entrar se tiene una sensación de gran movilidad y los elementos se sienten agradables al tacto gracias a la alta calidad de sus materiales. Dentro del coche no se perciben vibraciones o crujidos.

Algunas composiciones internas del coche están fabricadas con plásticos duros, pero no se sientes fríos o toscos. Tiene elementos de color rojo que contrastan con el negro regalando fuerza y vitalidad. El volante nos parece extaordinario. Esta diseñado con distintos botones para que puedas controlar casi todo el coche desde él.

Finalmente, otro elemento que nos parece imprescindible traer a la luz es su alto nivel de conectividad. Tienes acceso a vincular dispositivos IOs y Androide en la pantalla de 10.7 pulgadas que, siendo honestos, no posee los mejores gráficos con respecto a sus versiones pasadas.